La Liga

Ter Stegen, los palos y Gil Manzano, salvan al Barça

Atraco en San Mamés, arbitraje de Enríquez Negreira donde se nota que si cae el Barça, cae la Liga, corrupta hasta decir basta. En una primera parte de dominio infructuoso, el Athletic la tuvo en la cabeza de Raul García que escupió el larguero, no tuvieron la suerte que tuvieron los corruptos, que, en la única ocasión al filo del descanso, acertó.

Por si acaso, el VAR designado hizo su labor. El Athletic acertó en un robo de balón y juego en profundidad a Iñaki Williams la clavó. Pero ahí estaban los 7,5 millones aportados para informes arbitrales hicieron el resto. Incomprensible anulación del tanto.

Y a seguir que aquí no pasa nada. Sigan sigan. Escándalo en San Mamés. Otra victoria por 1-0, ajustada, sufrida, con dos balones del Athletic al palo, con una gran intervención del alemán Marc-André Ter Stegen que, si no llega a ser por él, el Barça se hunde, y lo más polémico, la anulación de un gol de Iñaki Williams por una supuesta mano de Muniain que, ante todo, es dudosísima.

Partido de corazón el del Athletic con una grada hoy enfervorecida para recibir al Barça y pedir justicia, justicia de la real, de esa que existe en otros países en los cuales los equipos chanchulleros y que compran partidos y ayudas arbitrales son castigados con el descenso. Aquí no pasará.

Porque hay un equipo que manejan la liga a su antojo por intereses que van mucho más allá de lo deportivo.