Los atléticos cruzan la línea del bien y del mal con la lesión del Papu a Valverde: es inadmisible

Quedan retratados con la acción

El duelo entre Real Madrid y Sevilla de este pasado sábado dejó varias conclusiones. La primera es que los de Ancelotti siguen sin perder un partido esta temporada y siguen siendo líderes en solitario. También que son capaces de ganar y golear, sin que esté Benzema en la convocatoria.

Pero también dejó claro que los atléticos cruzan la línea del bien y del mal con algo que es inadmisible. Y es que, con el partido prácticamente acabado, y con el Sevilla con los brazos bajados, el Papu Gómez hizo una entrada salvaje a Fede Valverde, que le hizo acabar el encuentro cojeando.

De hecho, se perderá el partido de este martes ante el Leipzig, porque no está recuperado y no se quiere arriesgar. Pese a todo ello, los colchoneros han demostrado que no tienen vergüenza, atreviéndose a bromear con la lesión de un jugador e intentándola menospreciar.

Y es que la han comparado con la entrada que el uruguayo le hizo a Morata en la final de la Supercopa en 2020. Hay que recordar que la del Papu es con un partido acabado, el resultado 3 a 1, y que fue sancionado exclusivamente con amarilla, a pesar de lesionar a un jugador.

Mientras que la otra, es en una final, en el 115 de la prórroga y con el 0 a 0 en el marcador. Además, esa entrada fue sancionada con cartulina roja, y el uruguayo la admitió. Y eso que fue sólo una zancadilla, y no como el sevillista que fue mucho más peligrosa.